Y se marchó…
Y se marchó tal y como vino, calladamente, sin hacer ruido, pero dejando una huella profunda. Después de más de 20 años por estas tierras de Perú, ya comienza su retirada, su merecida retirada, como dice él “calditos y poco más…”. Ya te mereces descansar en nuestra hermosa patria, aquella de la que saliste en muchas ocasiones para compartir, acompañar a tantas y tantas personas, a veces, ingratas. Han sido muchos los lugares en los que has vivido tu vocación de auténtico misionero franciscano. Lima, Ocopa, y muchos más, aunque últimamente has estado acompañando y sustituyendo al hermano Juan Oliver, en Requena, hasta que en Diciembre del 2022, por la marcha de Juan, un fraile, te vienes a vivir, por unos meses, a Contamana. En Contamana ha estado viviendo justo lo que dura un embarazo. Han sido meses de muchas risas, de unas buenas charlas improvisadas e inesperadas, de obligadas salidas a comer fuera cada domingo y alguna que otra fiesta (que aquí son muchas). Ahora quién